La soledad, igual que la gripe, es contagiosa, según un estudio realizado a partir de investigaciones en Estados Unidos.
Se puede propagar entre grupos de gente y las mujeres son más proclives que los hombres a acabar "infectadas", según los investigadores de laUniversidad de Chicago, de la Universidad de California-San Diego y de Harvard. Utilizando datos de un estudio a gran escala, encontraron que la gente solitaria tiende a transmitir sus sentimientos melancólicos o tristes a los que les rodean, que al final terminan dejándoles aislados de la sociedad.
"Detectamos un extraordinario patrón de contagio que lleva a las personas al borde de la red social cuando se hacen solitarias", dijo el psicólogo John Cacioppo de laUniversidad de Chicago, un destacado experto estadounidense en soledad.
Antes de perder a los amigos, las personas solitarias transmiten sentimientos de soledad a los amigos que les quedan, que también se vuelven solitarios.
Se puede propagar entre grupos de gente y las mujeres son más proclives que los hombres a acabar "infectadas", según los investigadores de laUniversidad de Chicago, de la Universidad de California-San Diego y de Harvard. Utilizando datos de un estudio a gran escala, encontraron que la gente solitaria tiende a transmitir sus sentimientos melancólicos o tristes a los que les rodean, que al final terminan dejándoles aislados de la sociedad.
"Detectamos un extraordinario patrón de contagio que lleva a las personas al borde de la red social cuando se hacen solitarias", dijo el psicólogo John Cacioppo de laUniversidad de Chicago, un destacado experto estadounidense en soledad.
Antes de perder a los amigos, las personas solitarias transmiten sentimientos de soledad a los amigos que les quedan, que también se vuelven solitarios.
LA SOLEDAD, SANTA SOLEDAD
Mi trabajo como redactor y fotógrafo me hicieron muy popular. Como el distrito en el cual vivía en Lima, es el más limpio, bonito, bien servido y visitado por muchos; me caían por mi casa o estudio decenas de amigos a tomarse un cafecito o una copa de vino, retrasando mi trabajo como periodista quien debe cumplir con horas de entrega en diferentes partes del mundo y obligándome a trabajar rápidamente y a confirmar los hechos a horas inoportunas para mis referentes.
Hace un año derruí mi estudio y mi casa que estaban en un áreas de mil metros cuadrados para construir dos torres grandes para vivir, tener mi estudio y alquilar el resto para profesionales sin atención al público.
Me mude "temporalmente" a un bonito departamento en un barrio popular. "Popular" por el nivel económico, no por las visitas inesperadas. Ahora paso horas leyendo escribiendo o tomando fotos en mi nuevo (y más pequeño) estudio. De vez en cuando algún amigo (y bienvenido sea) me llama por teléfono para preguntarme si puede acercarse a conversar conmigo y a preguntarme, ¿dónde puede estacionar su automóvil sin que se lo roben?
La distancia y la soledad me han convertido en una persona más productiva y, no añoro las visitas inesperadas.
La soledad tiene muchas ventajas. Entre ellas la introspección, el estudio (nunca se deja de aprender), la lectura, el Internet. La soledad no me ha vuelto "melancólico" ni "triste" y mucho menos "contagioso",
La soledad tiene muchas ventajas. Cuando deseo hablar con alguien lo (o la) llamo por teléfono y concertamos una cita; conversamos, nos reímos y nos despedimos y nadie sale "infectado".
Pueden pasar días en los cuales no veo a nadie mas que a la persona de la limpieza y mi cocinera y vivo feliz porque, tengo un divertido mundo interior.
Estar sólo y no tener mundo interior debe de ser terrible pero, no generalicen. La soledad es buena para quienes tienen mundo y debe ser terrible para aquellos cuyo “mundo” está atado al de los demás.